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viernes, 29 de agosto de 2014

España federal

Resulta llamativo que tantas grandes mentes pensantes de nuestro país no sepan que federar significa unir. Y unir lo que ya está unido... Me recuerda a esas películas de sobremesa dominical donde parejas casadas en Las Vegas deciden tener una boda tradicional; pero que, para poder hacerlo “bien”, con el boato debido, y para darle más realismo, antes se divorcian.

A perro flaco todo son pulgas. La crisis global nos ha arrollado y sus embravecidas aguas han sacado a la luz la mierda del fondo. Los eres de la Andalucía socialista, los gürtel peperos de Madrid y Valencia, los pujoles de Cataluña y CiU... hacen el aire irrespirable, se pone la monarquía parlamentaria a caldo y parece que el pacto constitucional del 78 está caduco en una España que se resquebraja.
Cada vez son más las voces que abogan por un estado federal como lugar de encuentro para las distintas “sensibilidades” nacionales.
A un estado federal se llega cuando varios estados acuerdan unirse y crear un gobierno conjunto al que se le atribuyen determinados poderes que se pueden ir ampliando (tendiendo, de hecho, cada vez a una mayor integración). Por lo tanto, hay dos premisas comunes en los estados federales: la existencia previa de unos estados plenos que continuarán teniendo los poderes que no transfieran al federal y la simetría en las competencias cedidas y conservadas. Además, una vez aceptado el pacto integrador, no suele admitirse el derecho a la separación. Véase la guerra de secesión estadounidense cuando los estados del sur quisieron proclamar su independencia.
El Roto
Ahora bien, en España no hay pluralidad de estados desde la época de los Reyes Católicos. Así que ¿cómo lo hacemos? Desde luego, una opción es estrellar el país para que se rompa en pedazos (quién sabe cuántos saldrían) que poder volver a unir estéticamente con la cola federalista. Pero puede que se pierda algún pedazo o que ya no encajen bien. Además, al no existir España, todos fuera de la UE. A ver luego cómo nos lo montamos para que nos vuelvan a admitir... juntos, en grupitos o por separado.
Por eso, hay quien dice que, aplicando la técnica del trampantojo, se reforma la Constitución, se reconoce la entidad nacional de las regiones y se las convierte en estados y como ya estamos unidos, ya estamos federados. Estado federal Español. Únicamente falta el tema de los poderes que ahora son de los estados federados, pero con dejar la representación nacional, la política exterior y la defensa a la federal, listo. ¡Viva la deconstrucción virtual!
Pero, claro, ¿y las “sensibilidades” nacionales? ¿quedarán satisfechas?
¿Cómo puede un estado federado manifestar su singularidad histórica (o mítica) y diferenciarse de los otros sin ciertos privilegios o asimetría en la federación? ¿Los demás estados, ahora plenipotenciarios, van a permitirlo? Y, en el caso de aceptarse una vinculación desigual, ¿quién determinará qué estado es más especial y, por ende, con más derechos? Además, ¿aceptarán sus dirigentes políticos no ostentar todo el poder y no poder tener sus propias embajadas o sus selecciones nacionales, por ejemplo; o en sus viajes no recibir honores de estado? ¿Converger en políticas comunes federales no seguirá siendo la disculpa de sus propios males?
Puede que el trampantojo federal sirva para establecer definitivamente los límites de las distintas entidades políticas, pero ¿acabará con las pulgas de la corrupción, de los problemas económicos, del paro, o tan siquiera con las malas pulgas de los nacionalismos?

El truco, quizás, sea alimentar al perro; es decir, sanear el país y fortalecerlo con reformas económicas y políticas que favorezcan a las personas y no a los chupópteros varios.

4 comentarios:

  1. ¡Qué razón ! ¡ qué claro! ¡qué bien escrito! Y resulta irrefutable, imposible la discusión; no importa la ideología que se tenga, incluso si eres un nacionalista recalcitrante, es imposible no hacer reverencia ante semejante razonamiento. ¡Enhorabuena! ¡Mucho ánimo! Vas a llegar muy lejos y te vas a convertir en un importante incordio para aquellos que piensan que pueden manipular a diestro y siniestro sin remisión, lo que implicará salvar no pocos escollos. No cejes en tu empeño.

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  2. Repasa la historia, cuando los reyes catolicos si existian estados (reinos) diferentes. Y durante un tiempo mas. En resto de acuerdo: cambiar para seguir igual, Lampedusa dix

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  3. Buenas lineas,puntualizo que en EEUU ,la guerra de cesecion fueron cofederados contra federados ,en la Espana de la 1era Republica ubo un ensallo afin..lo desbarataron los centralistas
    Saludos , me gusta tu forma tan clara de escribir.

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